La nueva película del realizador francés es la adaptación de la novela «La espuma de los días» (1947) de Boris Vian. Cuyo argumento gira en torno a Colin, un multimillonario inventor de un revolucionario instrumento musical, el pianocktail. Se casa con Chloe, pero caerá enferma en la luna de miel. La única opción para tratar su enfermedad es rodearla con flores frescas todos los días, ésto provocará que su fortuna se vaya reduciendo a marchas forzadas.
Tras este brillante avance lleno de los elementos que hacen grande a Michel Gondry, sólo puedo decir que espero con ganas este estreno, pero tenemos el problema de siempre. Mientras que el 24 de abril es la fecha de su estreno en Francia, para España todavía no.
El reparto está encabezado por importantes estrellas del cine francés: Audrey Tautou, Romain Duris, Gad Elmaleh y Omar Sy.
Visto en: Blogdecine
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Gondry se encuentra ante el gran reto de su carrera. Delante de él se planta “La espuma de los días” (L’Écume des jours, para los más refinados) uno de los grandes textos de la literatura francesa contemporánea, con su consecuente enorme trascendencia cultural. Este hecho agranda la carga de rigurosidad con la que se analizará el trabajo del realizador galo.
Para cualquier director “La espuma de los días” es un arma de doble filo: por una parte, un relato brillante, vivo, con fantasía e ingenio desbordante, parece creado para el celuloide; pero, por otra parte, el texto vence a cualquiera ante la problemática de hacer todo ese fantástico universo real en pantalla. El ejemplo precedente es Charles Belmont que la llevo a los cines en 1968 (pleno Mayo francés, con lo que ello suponía) y que a pesar de contar con muy buenas intenciones fue incapaz de captar todo el contenido de la obra. En general las obras de Vian son textos malditos para el cine, su dificultad reside en su complejidad, en lo aparentemente irrealizable.
Tal vez, la obra haya encontrado a su director. Tal vez, Gondry sea el idóneo para captar un universo de fantasía sin límites que parece diseñado para él. Lo que sabemos es que, seguramente, no creo que me equivoque, ocupará la portada de Cahiers du Cinema, y que será una de las grandes, sino la más importante, apuesta del cine francés para este año…sin duda.